martes, 13 de julio de 2021

Malifaux 3Ed.: Arcanistas

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La detención de Víctor Ramos en Broken Promises es una decisión que debería valer de ejemplo como historia narrada dentro de un juego de miniaturas coleccionables porque pocas veces he visto algo tan valiente como eliminar al líder de una facción y llevarlo tan bien. Mas allá de eliminar a un personaje que tiene miniatura propia con consecuencias directas sobre el metajuego está la forma en que Wyrd ha dado continuidad a este suceso y ha construido sobre él. Si simplemente desapareciera sin ninguna consecuencia entonces no sería tan importante pero aquí demuestran que van hasta el final.
Dos de las historias giran entorno a que uno de los personajes más importantes del trasfondo haya sido apartado de la escena, con un tercero que indaga más sobre la naturaleza corruptora de tener poder mágico y terminar en Malifaux buscando expandir ese conocimiento. ¿Realmente merece la pena el precio a pagar a cambio de poder arcano?


ARCANISTAS

 Publicado en verano de 2019

Cronología: mediados de 1907


Una línea dibujada con fuego

Escrito por Tim Akers.
Este es un relato de consecuencias. Tras la traición de Ironsides, la Unión se resquebraja por dentro en un peligrosísimo juego de lealtades divididas en el que cada miembro tiene que decidir a qué ideales es fiel y quien representa mejor esos ideales. La relación entre la Unión y los Arcanistas siempre ha sido algo complejo, pero que estaba aunado bajo el paraguas de Víctor Ramos por sus muchas facetas de cara al público. Por un lado, su aparentemente genuina preocupación por los trabajadores atraía a muchos a ser miembros de su sindicato, mientras que su oposición al Gremio era lo que le valía el respeto de muchos miembros de la Unión cuya verdadera intención era apoyar la causa Arcanista. Por esto, el grado de lealtad hacia la Unión, hacia la causa Arcanista o hacia Víctor como persona varía de miembro a miembro, por lo que el hecho de que fuera un miembro de la propia Unión que traicionó a Ramos provoca una ruptura irreparable.

El relato inicia con un flashback de Kaeris a sus primeros entrenamientos con Ramos cuando llegó a Malifaux. Es una escena breve, pero en la que podemos entender por qué Kaeris respetaba y defendía a Ramos, y de paso, enlaza bastante bien la información que teníamos de ella tanto de la Primera como de la Segunda Edición. De ahí hacemos un salto al presente, en el que Kaeris discute con el resto de una célula Arcanista sus siguientes movimientos. Según las instrucciones de Ramos antes de que lo capturasen, se suponía que debía atacar objetivos de importancia relativamente baja, no desatar el caos, pero ella no está dispuesta a conformarse con daños menores, lo cual despierta dudas entre algunos de los Arcanistas allí presentes, que se plantean si no será mejor seguir a Ironsides en lugar de a ella. Kaeris decide entonces que va siendo hora de arreglar sus diferencias con la persona que vendió a Ramos.

Pasamos a ver a Ironsides, quien va de camino a reunirse con el capataz de una fábrica del Gremio. Acompañándola va todo un convoy de escoltas que la protegen, no de atentados de agentes del Gremio, sino de miembros de la Unión y Arcanistas que quieren vengarse por lo que ha hecho, además de que su asistente informa de que muchas oficinas de la Unión en las Colinas Norteñas están respondiendo directamente ante Kaeris.

La reunión con el capataz, llamado Hermann Von Ossling, se salda con un intento de sobornarla, lo cual a punto provoca que Toni le parta las piernas. Justo en ese instante aparece uno de los Arcanistas que estaban con Kaeris al principio del relato, Clemmons, para advertirle de que con toda seguridad, Kaeris va a tomar la iniciativa contra ella. Toni parece perpleja ante la advertencia de Clemmons, a sabiendas de que este trabaja en el taller de Kaeris. Al preguntarle por ello, este responde que "es un taller de la Unión. Le debo todo a la Unión".  Para mí, esto es la mejor muestra de las muchas cosas que supone la Unión para la mucha gente que trabaja para ella, cómo cada uno tiene sus propios motivos para estar ahí, y por qué muchos de sus miembros lo único que quieren es que la Unión siga viva, a pesar del choque interno que está viviendo. 

La reunión con Vos Ossling termina. Al salir de la fábrica, Toni percibe que unos tipos la están observando. Ordena a su escolta que se marche sin ella, dispuesta a encargarse personalmente del problema. Camina por los callejones aledaños para tener algo de privacidad, pero cuando se da la vuelta no hay ni rastro de los matones. En su lugar, es Kaeris en persona quien ataca a Toni, descargando todo su poder ígneo. Anasalea no viene con los ánimos de discutir ni de mandar un mensaje, viene a matar a Toni sin ningún titubeo. Toni se defiende como malamente puede, cubriéndose de las llamas y tratando de acercarse a Kaeris todo lo que puede para encajarle algunos golpes. No resulta fácil con Ana pudiendo volar, así que a Toni no le queda otra que optar por una estrategia algo más comprometida. Huye hasta la factoría en la que tuvo la reunión, donde Kaeris no podrá maniobrar con la misma facilidad debido a la maquinaria y las vigas del techo. Además, una vez dentro, le advierte a Kaeris de que deberían dejar que los obreros abandonasen la instalación antes de continuar con su disputa. En todo momento Kaeris se muestra impasible ante los daños colaterales, pero permite que la gente se vaya, no sin que antes uno de los trabajadores se acerque a Toni y le ofrezca su ayuda, que ella rechaza.

La lucha continua y al poco rato la fábrica es un infierno llameante. Durante todo este tiempo Toni trata de hacer que Kaeris entre en razón, que comprenda por qué traicionó a Ramos. Toda la pelea que tienen estas dos es muy tensa, con un equilibrio siempre cambiante a medida que intercambian golpes sin casi darse cuartel. El único momento en el que parece que se dan tregua es cuando dos tiradores del Gremio hacen acto de aparición, pero tan pronto como han lidiado con ellos, vuelven a combatir entre ellas con un ahínco nunca visto, incluso con toda la fábrica viniéndose abajo sobre ellas. Ironsides termina cansándose de intentar solucionar las cosas de manera más o menos pacífica, por lo que pasa a la ofensiva dándole una soberana paliza a Kaeris. Luego de esto, la arrastra fuera del edificio.

El final del relato nos muestra a las dos Arcanistas debatiendo la decisión que tomó Toni, mientras el edificio arde a sus espaldas, ambas ensangrentadas y magulladas. Ironsides justifica su decisión no solo por una cuestión moral, sino sincerándose con Kaeris al hablar de Ramos. Víctor no era ningún santo patrón de los trabajadores, era un manipulador que se valió de la buena voluntad de los obreros por un lado y de la sed de revancha de gente que había sido agraviada por el Gremio, por otro. Kaeris es consciente de todo esto, de que para Ramos, tanto ella como el resto de los Arcanistas que trabajan para la Unión solo eran peones, pero no es fácil dejar atrás lo mucho que él le dio. Además, le duele que Toni tomase esa decisión sin siquiera consultarlo con ella. Ante esto, Toni responde que fue a ella a quien el Gremio acudió, porque sabían que con Kaeris no podrían entablar una negociación, así que sí era decisión suya. Sin embargo, insiste en que tal vez todo esto ha sido un plan del Gremio desde el principio, no solo el encarcelar a Ramos, sino también debilitar a la Unión enfrentando a sus líderes entre sí, por lo que extiende su mano a Kaeris en señal de concordia. Kaeris duda por un instante, pero se marcha volando sin devolverle el gesto a Toni. Por ahora, parece que las dos han resuelto sus diferencias, pero es demasiado pronto para que se llamen a sí mismas "aliadas".


Contra el viento

Escrito por Tim Akers.
La segunda historia de este libro es algo más personal, gira entorno a una pregunta clave: si de verdad el poder mágico que tienen algunos es una bendición o algo que los ha condenado a una vida en la que no pueden renunciar a ese poder a cambio de una vida feliz. Comienza con Sandeep tratando de buscar algo de paz en un estudio secreto. Intenta meditar, pero su esfuerzo es interrumpido cuando llama a su puerta un paisano suyo, Lohith Bhatt. Este acude aterrorizado en busca de la ayuda de Sandeep, narrándole el motivo por el que ha venido a Malifaux. Por lo visto, Lohith manifestó en la Tierra el poder de invocar a los gamin sin ningún esfuerzo, lo cual ya de por sí es toda una proeza, pero después de una invocación de cultistas del Hombre Ardiente que había por la zona, las apariciones de gamin se volvieron mucho mas habituales. Incapaz de controlar a las criaturas que han estado aterrorizándole a él y a su familia, ha cruzado la Brecha en busca de Desai, para que le enseñe una forma de anular a estas criaturas definitivamente. 

El primer impulso de Sandeep, sin embargo, es el de enseñarle a controlarlas como único medio para mantenerlas a raya, así que le entrega una Piedra de Alma a Lohith para que experimente su poder. El resultado es desastroso, pues de la chimenea del escondite emergen gamins de fuego que incendian el edificio por completo. Sandeep y Lohith escapan y el mago accede a un segundo plan para solucionar el problema de su compatriota: acudir a Rasputina, que casualmente está de paso por la ciudad.

Encuentran a Rasputina en un almacén propiedad de la Unión. Del pensamiento de Sandeep descubrimos que es una de tantas propiedades en las que Víctor estaba almacenando constructos para su siguiente gran movimiento, algo que no importa tanto para este relato, pero ya veréis en el próximo...La bruja de invierno está inspeccionando los aparatos que Ramos ha dejado atrás sin encontrar nada útil cuando Sandeep y Lohith llegan al lugar. Le cuentan el problema en cuestión, pero ella, lejos de aconsejar que se libren de este poder, insiste en que deberían enseñar a Lohith a manipularlo y dominarlo, a convertirlo en un maestro arcano como ellos. Esta es la parte más interesante del relato, porque en esta conversación se ven distintos puntos de vista sobre la relación de los personajes con el poder. Para Rasputina, el poder es la razón de ser de venir a Malifaux y su persecución es una meta en sí misma, mientras que Sandeep cree que el poder que han obtenido ha tenido un coste muy elevado. Él añora los tiempos en los que su vida era más sencilla, en su templo, antes de cruzar la Brecha, y por mucho que ahora sea uno de los magos más dotados de Malifaux, renunciaría a todo ello por la vida que Lohith posee, con una familia que le quiere esperándole en la Tierra. Es más, le recuerda a Rasputina que, aunque ella ya no vive la vida de sometimiento que tenia en la Tierra siendo una reclusa, ahora su situación no es tan distinta porque de cierta manera vive atada a la voluntad de Diciembre y a la necesidad que ese Tirano tiene de un huésped que poseer algún día. La pregunta de forma subrepticia es si la acumulación de todo este poder realmente ha merecido la pena para muchos de los personajes de Malifaux, pues a muchos les ha costado, en el mejor de los casos, la oportunidad de una vida normal. A otros, directamente les ha arrebatado la cordura, o vivirán eternamente atados al servicio de entidades mayores. Lohith no tiene dudas al respecto, no quiere saber nada de poderes mágicos, solo renunciar a unas aptitudes que él no ha elegido para volver con su familia.

Rasputina accede a ayudarles. Se embarcan a un pueblo minero que hay navegando río arriba hasta la mina de Bastion Hills. El lugar era una explotación del Gremio hasta que una infestación de gamins hizo imposible la extracción de Piedras de Alma. Esto de una infestación de gamins donde hay muchas Piedras de Alma no es algo usual, pero tampoco realmente nuevo, (en el libro de TTB Into the Steam se habla de las minas de Prosper Fields, donde una excavación de carbón y Piedras de Alma sufrió un incendio en 1788 y que a día de hoy sigue ardiendo, creado gamins de fuego en la zona). Una vez en la mina, Rasputina y Sandeep se abren paso a través de los monstruos que les salen al paso para llegar a una veta de Piedra de Alma. Cuando llegan a la principal cámara de la excavación, la marea de gamins se vuelve imparable, por lo que obligan a Lohith a que intente reunir todo su poder, aprovechando las Piedras de Alma que lo rodean, para controlar a los gamin. Al principio, parece ir bien. Lohith logra domar este poder de forma instintiva y las criaturas que antes eran hostiles se muestran sometidas por un momento. Él mismo parece que durante un instante deja de estar aterrorizado por su recién descubierto don y permite verse atraído por él.

Y entonces, cae. La veta de Piedra de Alma comienza a absorber el cuerpo de Lohith, que se hunde como si la pared fuera arenas movedizas, y los gamin empiezan a transformarse en golems. Desai trata de sacarlo de la pared, pero se ve incapaz. Rodeados por enemigos cada vez más fuertes, él y Rasputina no tienen más remedio que escapar de la mina dejando atrás al desgraciado Lohith.

Ya afuera, Desai acusa a Rasputina de haberlos engañado a sabiendas de que esto pasaría, de que su única intención era convertir a Lohith en un arma. Ella admite que es cierto, pero contraataca señalando la hipocresía de Sandeep. Por mucho que él añore la paz de su vida anterior, su primera reacción ante la súplica de Lohith fue enseñarle a manejar su poder en lugar de hacer algo tan simple como darle un talismán para espantar a los gamin. Podría haberlo "curado" de sus males, pero no lo hizo, porque está tan sediento de poder como ella, solo que es mucho menos honesto al respecto, y si confió en ella, entonces todavía tiene mucho que aprender de Malifaux. Los dos toman caminos separados después de esto. Como último acto de la historia, Sandeep manda un regalo a la familia de Lohith a modo de consolación: una cometa. La hija de Lohith, Pria, se limita a coger el regalo y arrojarlo al fuego. Su padre no volverá.


El reloj del hombre muerto

Escrito por Tim Akers.
Nuestro relato final comienza in media res. Tras una operación Arcanista fallida, un par de miembros de la organización tratan de poner tierra de por medio entre ellos y los Cazadores de Brujas. Logran darles esquinazo al entrar en un gran edificio que parece abandonado, pero esto no podía estar más lejos de la realidad. Cuando entran por un pasadizo secreto, resulta que el edificio es uno de los refugios Arcanistas que hay repartidos por la ciudad. Este en particular tiene un sótano repleto de constructos que llevan el sello de Víctor Ramos. Los constructos se encuentran desactivados, alineados contra las paredes, pero sobre el dintel del sótano hay una especie de reloj que, resulta, parece ser una cuenta atrás. Los dos Arcanistas pasan a la planta superior, donde hay comida almacenada y una litera, pero al poco de acomodarse, se escuchan sonidos viniendo del piso de abajo. La primera sospecha es que los Cazadores de Brujas los han encontrado. No tardan en ser atacados por la miríada de constructos del sótano y ambos pierden la vida. 

Al día siguiente, del edificio no quedan más que cenizas (y ya van tres edificios que arden en lo que llevamos de libro) y Joss contempla a los equipos de extinción de incendio del Gremio retirar los escombros y los cuerpos, tanto de los Guardias del Gremio que han muerto eliminando a los constructos como de los dos Arcanistas. Tras esto, Joss marcha a unas minas en las Colinas Norteñas, donde días después tiene lugar un encuentro entre líderes de la Unión. Pero estos líderes no son los másters, sino los gerentes, los administrativos, los jefes de las subdivisiones de la Unión. En el párrafo que nos describe los integrantes de la reunió secreta, lo cierto es que tenemos una visión más profunda de lo que la Unión "es", como sindicato. Es una visión relativamente poco habitual, porque por lo general, los relatos que escribe Wyrd tienden a desdibujar la Unión como la tapadera de los Arcanistas, por el motivo obvio de los personajes principales son, después de todo, Arcanistas, mientras que la faceta de "sindicato de trabajadores" se queda un poco olvidada. Esta es precisamente la cara que se nos muestra esta vez, la de la gente corriente que trabaja por el bien de los obreros, de los mineros, de los peones de obra, de aquellos que tienen un genuino interés por el bienestar de los desfavorecidos y no les interesa meterse en los planes Arcanistas. Ni siquiera parece que se sientan cómodos formando parte de complots y conspiraciones. Por eso, es muy curioso el examen que se le hace a la figura de Ramos por miembros de la organización que dirigió en su día. 

Me explico: resulta que este ha sido el cuarto edificio en el que se han activado constructos, todos ellos eran refugios Arcanistas de los que esta gente no tenia ni idea de su existencia, incluyendo a Joss. Los asistentes de la reunión discuten si deberían o no tratar de detener estas activaciones, sobre los pros y los contras de causarle caos al Gremio al precio de perder recursos y llamar la atención de forma no intencionada, pero sobre todo es interesante cuando se paran a reflexionar sobre el por qué de todo esto. Ramos era una persona con sus propios planes a espaldas de todo el mundo y posiblemente esto era algo previsto, pero no contaba con que lo detuvieran y lo mandaran a Viena. En debate final, entre si tratar de detener o no a los constructos que quedan, Howard Langston toma la palabra, confesando que no quiere hacerlo por una cuestión de lealtad personal, pues siente que le debe a Ramos su vida y que no es el único, y si esta era su última voluntad, no se opondrá a ella. Joss, por su parte, no piensa dejar que esto afecte a la Unión, así que decide actuar. Langston confiesa que conoce uno de los escondites en los que Ramos escondía constructos, al que Joss se resuelve a ir de inmediato.

Sin embargo, el Gremio se le ha adelantado. Joss encuentra la zona acordonada por constructos de combate y al mismísimo Charles Hoffman con un equipo de mecánicos desarmando los constructos, ya que sus poderes le han hecho percibir a los constructos poco antes de que empiecen a activarse. Joss le advierte de que no tienen tiempo de desmantelarlos a todos y de que deberían alejarse de la zona cuanto antes, pero a los pocos minutos, los constructos del escondite se activan. De inmediato se libra una batalla entre los constructos de uno y otro lado, con Hoffman acordonando la zona para limitar los daños y pidiendo refuerzos al tiempo que Joss se lanza como una fiera a por el constructo más grande de todos. La primera oleada de los constructos Arcanistas cae, pero Joss sabe que la verdadera sorpresa está por llegar. Se adentra en el almacén esperando encontrarse con algún monstruo mecánico, pero lo que emerge del suelo supera cualquier cosa que se imaginaba. Una criatura con forma de ciempiés deforme, con una cabeza gigantesca y armado hasta los dientes con sierras y tentáculos, surge con una furia animal, agitándose de forma espasmódica. Joss percibe que algo va mal por su comportamiento errático, pero en su falta de coordinación, el constructo descontrolado es incapaz de defenderse, recibiendo múltiples ataques de las máquinas del Gremio a la vez. 

Hoffman está asombrado por la criatura que acaban de abatir. A primera vista parece un experimento fallido, pero Joss sabe que Víctor siempre aspiraba a romper las barreras con sus creaciones. En su antinatural comportamiento, esta máquina ha sentido dolor. Al inspeccionarla mas de cerca, descubren por qué: la máquina es una amalgación, con el cerebro de una persona funcionando en el interior, alguien que ha vivido unos breves instantes de miedo y agonía en un cuerpo que no era el suyo. Hoffman se queda horrorizado, manifestando su rechazo por el experimento. Joss, sin embargo, le recrimina que es hipócrita por su parte acusar a Ramos de haber ido demasiado lejos con sus experimentos cuando él mantuvo a Riley con vida tanto tiempo de forma artificial. Además, atendiendo a su condición de mutilado, y recordando a Langston, Joss opina que no son quienes para juzgar estas acciones, pues a saber si la persona de la máquina era un voluntario, quizá un enfermo o un tullido, pero Hoffman se reafirma en su papel como juez de esta clase de acciones. 

Joss no es ningún ignorante, es consciente de que habrán más escondites, más almacenes, más experimentos secretos de Ramos. Sabe, también, que probablemente Ramos ha cruzado una línea con estos experimentos, por lo que le propone a Hoffman ayudarle a prevenir la activación del resto de sitios. Sin embargo, esto debe de hacerse sin la intervención del Gremio, pues Joss no quiere que estos sucesos salpiquen a la Unión. Hoffman acepta, por lo que de esto podemos entender que ahora Charles también sea miembro de los Arcanistas, si acaso para evitar una catástrofe por el legado que Víctor Ramos dejó tras de sí con la ayuda de un guardaespaldas que, tal vez, se siente traicionado por una figura que en su día vio como la esperanza de los desamparados.


Información de los modelos 

En líneas generales, la información nueva más importante viene cubierta por los relatos del libro de facción, pero el libro hace un esfuerzo por recapitular las historias de algunos personajes, lo que las hace más fáciles de comprender y hay alguna que otra sorpresa. De Marcus hay mucho que sacar, porque se afirma que ahora está aliado con la Reina de Otoño, pero eso se cubrirá en el libro de los Neverborn. Algo que creo que no es del todo coherente es que en el párrafo del Iniciado de la Orden se afirma que Marcus fundó la Orden de la Quimera, pero estoy seguro de haber visto que no es el caso, sino que la Orden fue fundada en la Tierra y más tarde contactaron con Marcus. En el párrafo de Marcus dice que "algunos magos le pidieron que hiciera algunos experimentos en Malifaux", pero no especifica que estos fueran de la Orden. Mas cosas: tenemos el nombre de quien creó el Scorpius, un científico de nombre Glauco Parante, que intentó emular el genio de Ramos, pero el experimento le salió muy mal, porque terminó matándolo nada mas encenderlo. En cuanto a Paul Crockett, resulta que el tipo estaba grillado ya antes de cruzar la Brecha, habiendo cometido asesinato en serie de unos cazadores particularmente ineptos en un arrebato de salvajismo, y luego decidió "unirse" a la Orden de la Quimera tras mostrar su valía matando un cerbero de Marcus.

Toni Ironsides aparece con toda su biografía, cambiando mucho el tono con lo que teníamos en su primera aparición en Crossroads. Antes era una agente feliz de hacer cualquier encargo para la Unión, mientras que ahora se nos describe como alguien más inteligente que se sentía incómoda por tener que luchar de cuando en cuando contra otros Arcanistas. Algunos personajes secundarios que reciben información extra son Amina Naidu, que a pesar de su duro esfuerzo por defender a la Unión resulta que está espiando para patrones de la Tierra, y Joshua Fitzimmons, antiguo propietario de una destilería que siempre ha velado por el bienestar de sus trabajadores, pero cuya propiedad fue confiscada por el Gremio al encontrar pruebas de que trabajaba con licor de gremlin, estrictamente prohibido. Desde entones es un líder sindical del Gremio que dirige las marchas y manifestaciones.

Acabando con los modelos, tenemos la anécdota de cómo Carlos Vásquez fue admitido en el Star Theatre y la historia del nuevo personaje de la banda de Kaeris, el líder anarquista Elijah Borgmann, que resulta que era líder de una banda de agitadores de Londres hasta que el Hombre Ardiente hizo su aparición y los convirtió en "marcados por el fuego". Sus ansias por enfrentarse al Gremio lo llevaron a él y a los suyos a Malifaux, donde encontraron un aliado en Kaeris. El último modelo del que hacer mención es el Jinete Mecánico, porque en su párrafo se comenta que en el Codex Mortis (traducido como Libro de los Muertos, es la primera vez que se menciona) hay una descripción de ella y de los otros tres jinetes, una imagen que se reproduce no solo en las leyendas y religiones de la Tierra, sino también de Malifaux.

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